Acrópolis

La palabra acrópolis proviene del griego y significa “ciudad en lo alto”. Construida en el periodo clásico del arte griego durante la segunda mitad del siglo V a.C., la acrópolis de Atenas fue emplazada en la colina, punto más alto de la ciudad. Esta disposición cumplía una doble función: militar, ya que actuaba de ciudadela, y religiosa, se situaba más cerca de los dioses. Se trataba de un conjunto de edificios de carácter religioso y municipal formado por el templo principal, el Partenón, dedicado a Atenea, el Erecteion, el templo de Atenea Niké y la monumental entrada, los Propileos, situada en la parte occidental. Desde el punto de vista artístico, además de por su grandiosidad monumental e importancia artística, el conjunto destaca por ser un ejemplo de perfecta convivencia y complementación de los órdenes dórico y jónico. El Partenón fue proyectado por el arquitecto Ictinos. Tenía ocho columnas en la fachada en vez de seis, superando así en majestuosidad a otros templos...